Vestida como el 99 por ciento de las chicas que encuentro en la calle, Nina North parece típica. Pero algo inexplicable le sucede cuando sus bragas llegan al suelo. Hay un magnetismo natural, o más bien animal, que viene de alguna parte, y quieres meter tu gorda polla en su boquita. Ella es única en ese sentido.
Wow, que princesa tan sexy. A pesar de que todavía es joven, se mete los dedos en el ano con un silbido, sospechando que mucho más va a caber allí. No es una compañera aprensiva se puso, lamió su coño y su ano, no todos los hombres son capaces de hacer eso. La chica no se quedó en deuda y le dio placer a cambio, tanto oral como analmente. Para una polla tan gruesa el anal habitual no es bueno, pero el de esta chica ya está bombeado y preparado.