La mulata es tan menuda, no sólo sus tetas, sino también su visón y su culo. Y qué decir de su cintura, qué cintura, como la de una hormiga. En definitiva, el apretado coño se llevó una cogida loca de semejante polla. Pero ella era la única que gemía, ¿y el hombre era completamente de madera, con una polla así y una mulata al lado? A duras penas llegué al final, todo estaba hinchado y tieso, casi me corro diez veces.
Un instructor debe desarrollar las habilidades de sus alumnas, notar sus inclinaciones y actuar en esa dirección. Y esta doncella era la que mejor tocaba la flauta de cuero. Esta habilidad la beneficiará mucho, no sólo en sus estudios, sino también en la vida cotidiana. Lo principal son los ensayos diarios y en diferentes flautas.
Puta, ¿dónde vives?